No hay nada como decidir que una quiere una tarde tranquila para que pasen cosas raras... Después de trabajar he ido a casa con la intención de coger la mochila e ir a la compra antes de hacer nada. Al llegar me he sentado un momento y como estaba cansada he decidido que mejor me daba una ducha para relajarme antes de volver a salir. Pero no ha podido ser: cuando estaba a punto de empezar ha saltado la alarma de incendios, que es una cosa que ya me ha pasado varias veces desde que estoy aquí. He salido del baño, he comprobado que no hubiera nada raro en el piso (ventajas de que sea tan pequeño, en un momento lo has hecho) y me he acercado a la puerta a apagar la alarma. Al acercarme he oído que también sonaban las del pasillo, así que he abierto la puerta y no he visto ni olido nada raro (salvo a mi vecina de enfrente en camisón y bata a las 6 de la tarde...) Como la alarma no paraba me he asomado a la ventana y en ese momento llegaban 4 coches de bomberos y empezaba a salir mucha gente del edificio así que me he calzado corriendo, he cogido el abrigo y el bolso y me he ido a la calle. Antes de llegar a la escalera ya entraba un bombero en la planta para desalojarnos. Vamos, que llego a cambiar de idea sobre lo de ir a comprar dos minutos antes y el bombero me pilla en la ducha (asumo el juego que puede dar este comentario, pero os aseguro que a pesar de la fama que tienen los bomberos no es una situación que me apetezca vivir... =D)
Al final no he llegado a enterarme de qué es lo que pasaba porque cuando he salido del edificio y he notado el frío me he dado cuenta de que había cogido el abrigo pero no el jersey, ni la bufanda, ni los guantes (soy muy hábil...). Así que para no coger una pulmonía esperando en la calle me he ido al supermercado y cuando he vuelto ya había pasado todo.
Y puesta a contar cosas poco hábiles... este fin de semana fui a IKEA y me autoatropellé con el carro. ¡No os imagináis el chichón que tengo en la espinilla! Espero que desaparezca pronto porque como no lo haga temo la clase de yoga del miércoles.
¡Besos!
Jajaja, me ha gustado mucho eso de que no sabes si el edificio está en llamas, pero tu te vas a la compra...
ResponderEliminarLo del bombero..., ¡qué palo si te encontrara en la ducha! da juego de bromas, pero..., poco práctico...
Y lo de Ikea..., jaja, espero que no te duela mucho ;) (y que no se te olvide el sofá cama)
Un beso!
No estaba en llamas, no había humo... =D
ResponderEliminar¡Te atropellaste con tu propio carro!, fijate que no acabo de ver claro cómo puedes empujar un carrito a la vez que haces que se dirija hacia a ti con fuerza suficiente para atropellarte.
ResponderEliminar¿Seguro que no fue a propósito para ver si llegabas a conocer a un médico canadiense?